Yoga dinámico 2 - Balasana

Como construir balasana
     

Para construir esta postura de yoga, dóblate sobre las pantorrillas, de modo que, si es posible, las costillas reposen en los muslos.  Los empeines en contacto con el suelo, las nalgas hacia los talones, frente en el suelo. Separa las rodillas entre sí lo suficiente para que tu espalda baja se sienta más cómoda y libre de tensión y tengas espacio para que la respiración se dé con más facilidad.  Los dedos gordos de los pies se acercan o se tocan. 
Relaja los brazos a los lados del cuerpo, por delante de la cabeza o debajo la cabeza en el caso de que la frente tenga dificultad para tocar el suelo.  Asegúrate de que tus hombros permanecen anchos y relajados,  alejados del cuello y de las orejas.

Relaja todo el cuerpo.  Suaviza los músculos de las ingles, el suelo pélvico y de la cara. Suaviza los músculos del pecho, el vientre y de la espalda sintiendo las sensaciones que genera el movimiento de la respiración orgánica, espontánea y sin esfuerzo en estos espacios.

Inconvenientes al construir balasana

El cuello, las rodillas y los tobillos pueden ser problemáticos en esta postura de yoga. Por ello, puedes usar como soporte los brazos, las manos o los puños si la parte incómoda es el cuello. Si las sensaciones de las rodillas o los tobillos son demasiado intensas o duelen, pueden volverse más cómod@s metiendo los dedos de los pies hacia las rodillas,  o usando un  cojín como soporte detrás de las rodillas o bajo los tobillos.

Esperamos que hayáis disfrutado practicando esta postura de quietud.  En la próxima publicación daremos más detalles de la postura de yoga llamada Hasta Balasana. 

Si todavia no has leído el artículo anterior sobre los beneficios de esta postura de yoga, pincha sobre este enlace:  Beneficios de Balasana

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