martes, 21 de junio de 2022

SEGUIR UN CAMINO ESPIRITUAL CON SENTIDO

 


Seguir un camino espiritual es empezar a entender que la felicidad no se encuentra fuera, sino que es un estado de la mente.

Una mente feliz, lo es cuando está en paz.  Si no hay paz, nada puede satisfacernos.  Cuando la mente está en paz, todo es motivo de felicidad.

El camino espiritual es el que emprendemos para abandonar nuestras perturbaciones mentales,  nuestro ego.  Estas perturbaciones están producidas por los engaños de una mente que no ve las cosas tal como son y que lo exagera todo. Es como si continuamente estuviera alucinando.  La función de este tipo de mente es perturbar  su paz natural.

Emprender el camino espiritual es decidir abandonar las perturbaciones mentales y descubrir que,  al abandonarlas  hay, energía, claridad, paz, sabiduría, ecuanimidad, amor...  Transformar la mente es empezar a identificarse con esta paz, con la naturaleza clara y amorosa de la mente, hacerse íntimo con ella y al mismo tiempo dejar de hacerlo con las perturbaciones mentales.

Al  practicar la meditación nos damos cuenta de que  son nuestras perturbaciones las que nos causan sufrimiento, las que nos roban la energía.  Al darnos cuenta de ello,  podremos empezar a abandonar este camino  y dejar de ser su esclavo.  

Buda lo describió claramente a través de las cuatro nobles verdades: Conoce los sufrimientos, abandona sus orígenes.  Practica los caminos y  alcanza las cesaciones (del sufrimiento).